Por: José Vicente Cortés Moreno
Cuando Pedro de Añasco, Juan de Ampudia y Miguel López entraron por el sur al altiplano nariñense en 1535, inició el viacrucis para los nativos. EI primero de agosto de 1524 el Consejo de Indias creó el gobierno político y administrativo de jurisdicción civil y criminal que les permitía a los ibéricos cometer toda clase de violaciones y atropellos en la dignidad del indígena; en 1542 el sacerdote Dominico Fray Bartolomé de las Casas intervino para que se dictaran algunas leyes que tenían la intención de atenuar el sufrimiento de
los indios; los conquistadores, encomenderos y clérigos no las cumplieron estos eran acostumbrados a la servidumbre y a la guerra de conquista. (Friede Juan, Bartolomé de las Casas, precursor del anticolonialismo, su lucha y su derrota, Siglo XXI, México, 1974)
No existe, un informe contemporáneo sobre las tradiciones, usos, creencias e idiomas de los distintos grupos indígenas; las lenguas se extinguieron sin que nadie compilara un vocabulario o un arte gramatical, y los archivos que una vez habrán tenido material al respecto han perdido gran parte de sus fondos antiguos ( K. Romoli). Lo que se sabe está dado por las crónicas de Cieza de León, los documentos del Archivo de Indias y otros; los hallazgos arqueológicos, los análisis antropológicos, la tradición oral y la recientes investigaciones de etnohistoria.